doct15 La Inmortalidad del Alma

Inmortalidad del Alma

La Inmortalidad del Alma

Por David Cox

Revisión gramatical y Redacción: Luis Flores E.

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El Alma

En Gén. 2:7 Dios formó un cuerpo humano y sopló en el vida espiritual. Por la respiración divina, el hombre tiene un alma (Job 33:4). Dios pone el espíritu en el hombre (Zac 12:1). El alma es la fuerza espiritual que anima el cuerpo, algo divino que distingue a una persona de las piedras, plantas, Etc. Se identifica “como de Dios”, y por esto, se pueden entender asuntos espirituales relacionados con Dios. El hombre puede matar el cuerpo, pero solo Dios puede disponer del alma (Luc. 12:4).

El “alma” en el AT a veces se refiere al cuerpo físico (vivo o muerto), lugar donde la conciencia mora hasta su muerte física, y después de la muerte, su alma sigue viviendo separada de su cuerpo hasta la resurrección. La idea bíblica es que la muerte física separa al cuerpo del alma y en el gran juicio, serán reunidos nuevamente para entrar en la eternidad.


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La existencia de un ser se basa en dos cosas: una existencia física en un cuerpo y el alma que anima a la persona, que controla su cuerpo, y por lo cual goza de una existencia física en el mund. La Biblia establece las bases del alma y del cuerpo, dando a la persona existencia en el mundo y percepción y capacidad para relacionarse con Dios. Ambos son eternos, aunque la existencia de unos será en el cielo y otros en el infierno.




La Vida Eterna y La Segunda Muerte

La muerte física en la Biblia es el fin de la vida terrenal. Cuando el cuerpo deja de funcionar, una puerta lo espera (el juicio). Cuando la Biblia habla de “vida eterna,” (concepto de placer), y la “segunda muerte” (idea de sufrimiento). Entonces, todos tendremos inmortalidad del alma. Así, la muerte física termina con la vida terrenal, pero la segunda muerte es una existencia inaguantable en extremo para quien la recibe.

1 Juan 2:25 Y ésta es la promesa que él nos hizo, la vida eterna. Sí existimos después de morir, Jesús dio la promesa en este pasaje. ¿Qué significa aquí la “vida eterna”? 1 Tes 4:14 Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también traerá Dios con Jesús a los que durmieron en él.

La Biblia dice que los muertos salvos duermen, están vivos pero sin conciencia de las cosas del mundo. Dormir es descansar sin tener conciencia del mundo, pero no es dejar de existir. Luc 20:36 Porque no pueden ya más morir, pues son iguales a los ángeles, y son hijos de Dios, al ser hijos de la resurrección. La vida eterna es la continuación de la existencia, donde se goza de vida agradable (como ángeles), pero de manera muy diferente a lo que perciben las personas en la tierra.

La segunda muerte es mencionada cuatro veces Apo 2:11; 20:6, 14; 21:8. Apo 20:14, Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda. Dios definió la segunda muerte como existiencia en el llamado “lago de fuego” Según Apo 2:11, el salvo “no sufrirá daño de la segunda muerte.” La existencia después de la muerte física para los malos es “sufrir daño” o “ser castigado” (2 Ped 2:9). Job 21:30 sugiere que los impíos serán preservados (“para el día de la ira”).

Los malvados “no estarán”, y los salvos “serán establecidos”. Los malvados roban inicuamente a los justos para vivir en lujos (son dueños de bienes). Su vida impía es para “establecer” un lugar en la tierra. Los justos experimentan pérdida de bienes, de hogar y de otras cosas, son como vagabundos y peregrinos. La salvación es un cambio de estas situaciones (Salmo 37:35-36). Dios quitará del malvado su cúmulo de cosas que “le establecen” su lugar (Salmo 37:35-36; 104:35; 52:5-7; 59:13; 145:20), y da al justo lo que ha perdido por Cristo (una “herencia”, “una mansión” Mat 5:5).

Sal 37:9 Porque los malignos serán destruidos, Pero los que esperan en Jehová, ellos heredarán la tierra. 10 Pues de aquí a poco no existirá el malo; Observarás su lugar, y no estará allí.

Lo que la Biblia enseña es que los malos existirán, pero su existencia no será algo “establecido” como los justos (una herencia), será una existencia “sin existir”. Esto no es aniquilación, sino que no será establecido sino que será un lugar desagradable inestable, sin aquello que hace a un lugar bueno es decir, un lugar fijo. El hecho es que veremos a ellos allí, pero nosotros no estaremos allí, esto habla del tipo de existencia que ellos tendrán, pero no será algo bueno o estable.




La Resurrección

Si no hay vida y conciencia después de la muerte, entonces la resurrección no tiene sentido. Dios va a revivir nuestro cuerpo y reunir el alma, espíritu y cuerpo en uno. Esta resurrección está dividida en dos partes: (1) la resurrección a vida eterna, y (2) la resurrección de pena y castigo. Daniel 12:2 Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua. Job 19:25 Yo sé que mi Redentor vive, Y al fin se levantará sobre el polvo; 26 Y después de deshecha esta mi piel, En mi carne he de ver a Dios; 27 Al cual veré por mí mismo, Y mis ojos lo verán, y no otro, Aunque mi corazón desfallece dentro de mí. Job tuvo toda la confianza que sería una resurrección de su alma y cuerpo, y que vería a Dios con los mismos ojos que tenía cuando habló esto. En Mat 22:32 Jesús reclamó a los fariseos, afirmando que Dios es “Dios de los vivos”. Mencionó que Abraham, Isaac, y Jacob, son o están todavía vivos.

1 Cor 15:51 He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos; pero todos seremos transformados, 52 en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados. 53 Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad. 54 Y cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte en victoria.

La palabra “mortal” thnetos es una forma de la palabra thnesko (a morir), y significa que puede morir. La inmortalidad que Pablo menciona aquí es la palabra normal para la muerte (thanasia), pero con el privativo “a”, que la hace significar “sin la posibilidad de morir”.




La Aniquilación

El concepto opuesto a la inmortalidad del alma es la aniquilación, que toma varias formas. Unos creen que al morir no estará el alma, y que tampoco habrá sufrimiento para nadie. (igualmente no habrá conciencia).

Otros proponen que después de un tiempo de sufrimiento en el infierno, Dios, en misericordia va a extinguir sus almas, y jamás vivirán. Los Testigos de Jehová proponen que ni los salvos ni los inconversos existirán después de la muerte física, y de una manera inexplicable, Dios va a reformar los 144 mil de ellos.




Hay Juicio después de la Muerte

Heb 9:27 Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio, Este versículo declara que hay un juicio para todos después de la muerte. La Biblia afirma que habrá eventos post-muerte para cada persona, las personas tienen que existir después de su muerte física. No hay otra alternativa.




Lázaro y el Hombre Rico (Lucas 16:19-31)

Esta enseñanza de Jesús, ha sido muy atacada y destrozada supuestamente por los que niegan la vida después de la muerte. Arguyen que es una parábola, y que no enseña la inmortalidad, sino que no debemos vivir en lujos ni como avaros. Pero la Biblia no enseña mentiras y falsedades como si fueran ciertas. Lo que enseña esta parábola es exactamente esto, que hay retribución después de la muerte, bien para los buenos en vida, y mal para los ruines. Dos hombres (representativos) murieron y cada uno recibió lo justo por sus hechos. Si no hubiera existencia o conciencia después de la muerte, entonces Jesús usó una mentira para enseñar contra la avaricia, cosa que no aceptamos tampoco.

2 Cor 5:10 Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo. La Biblia declara que todos (buenos y malos, inconversos y salvos) tenemos que comparecer ante el tribunal para recibir lo que hemos hecho en esta vida (Ecl 12:14; Job 34:11; Sal 62:12; Isa.3:10-11; Rom 14:10; Efe 6:8; Apo 2:23; 22:12). Los que niegan la Biblia dicen que este juicio será hecho mientras uno está vivo, pero Dios ubica el juicio después de la segunda venida de Cristo “el Hijo del Hombre vendrá… entonces pagará a cada uno conforme a sus obras” Mat. 16:27 cp 1 Cor 4:5.

Rom 2:5-10 habla del pago a buenos y a malos. En este pasaje, el pago es específicamente de “vida eterna… inmortalidad” v7 para los buenos, e “ira y enojo… tribulación y angustia” para los duros de corazón. Apoc 20:12-13 habla directamente de este juicio como después de la segunda venida de Cristo, Es decir, posterior a todos los eventos de Apocalipsis, y entrando “a la eternidad”, (o sea, el tiempo después de lo que Dios habló en ese libro).

Lucas 16 reafirma este concepto, la aniquilación es contra la clara enseñanza bíblica. Hch 10:42 “que Dios ha puesto por Juez de vivos y muertos”. Dios claramente manifiesta que Él es Juez de los muertos, así como de los vivos (1a Pedro 4:5).




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